AUNOR PARQUES INFANTILES, MOBILIARIO URBANO Y COLUMPIOS

El Centro Asturiano de Oviedo vivió ayer una jornada de fiesta. No era septiembre y las fiestas de Nuestra Señora de Covadonga quedan lejos aún, pero el ambiente entre los socios, sobre todo los más pequeños sí parecía festivo. Se trató de una jornada de ocio infantil en la que las familias quedaron gratamente impresionadas con el resultado de una obra que se inició a principios de verano y que conllevó una gran inversión.

Un nutrido numero de niños comenzó la tarde con el concierto de la cantante Susana. La veterana de los escenarios infantiles deleitó a los pequeños con una cuidada selección de sus mejores canciones.

Tras la visita oficial a la que acudieron el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes y el alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, entre otras personalidades como el párroco José Franco, se procedió a bendecir las instalaciones y más tarde se abrió al público que quedó muy sorprendido con el complejo, que aprovechó una superficie infrautilizada en el centro.

Los 1.200 metros cuadrados interiores quedaron divididos por edades, con aulas para hacer deberes, leer o dibujar y, cómo no, jugar.

Toboganes, colchonetas, pelotas, piscinas de bolas, redes para trepar, billares, futbolines, canchas de fútbol y baloncesto para cuando llueva... y todo tipo de juegos infantiles en los que hay hasta casitas.

De 0 a 3 años los bebés cuentan con cunas y juguetes acordes a su edad y en un lugar adaptado, para que se encuentren cómodos.

Aunque pareciera que es suficiente, la zona exterior también se aprovechó, los 2.500 metros cuadrados tienen colchoneta en la zona de juegos y césped con un estanque en el centro en el que más de uno tratará de zambullir sus barcos de juguete.

En total pueden entrar a la vez unos 500 niños a los que seguro les costará elegir entre todo lo que hacer.

La parte exterior está acondicionada para que los padres puedan vigilarles desde los bancos y también cuentan con un circuito vial, con semáforos incluidos donde aprenderán a ser prudentes al volante.

Para practicar, unas veinte bicicletas, motos y triciclos para distintas edades esperan aparcadas bajo un techo al exterior. Los columpios tambien estaran alli presentes y un pavimento amortiguador continuo de seguridad velara por sus caidas.

Y si alguno todavía se aburre puede acercarse a la sala de gimnasia, donde puede utilizar las pequeñas bicicletas estáticas y aparatos de tonificación.

En total, casi 4.000 metros cuadrados en los que niños hasta 12 años y padres disfrutarán por décadas, también en la terraza superior, que otorga unas espectaculares vistas de la ciudad, según indicó en alguna ocasión el presidente, Alfredo Canteli, al que también se lo vio pasando un buen rato en las instalaciones y comprobando si todo funcionaba.

Rememoró tiempos pasados con el alcalde en una máquina recreativa. También hizo lo propio el arzobispo, que echó unos tiros desde la cancha de baloncesto con mayor y menor acierto.